No. No es un montaje. Se trata de uno de los científicos más importantes del mundo vistiendo sandalias con tacón. De hecho, cuenta la historia que cuando fue a la tienda para comprarlas el encargado entendió “sundials” (reloj de sol) en lugar de “sandals” ya que no daba crédito que Einstein buscase sandalias.
Cuando le mostró el instrumento de medición solar le dijo que buscaba sandalias ya que no usaba calcetines porque odiaba ver cómo su dedo pulgar los destrozaba en cuestión de días y era un gasto del todo innecesario. El encargado se disculpó diciendo que sólo tenía sandalias de mujer.
Albert Einstein contestó que si no tenía problema en vendérselas, él no tendría ninguno en comprarlas. “Además -añadió- si las mujeres pueden usar pantalones por comodidad, ¿qué tiene de malo o extraño que yo use sandalias con tacón?” Genio y figura.